Cómo detectar y tratar los problemas de hígado en perros mayores

Por: Aparato Edupet Santiago Debemos recordar lo fundamental: El envejecimiento es una época habitual de la vida: la vejez no es una patología, no obstante, conforme nuestras mascotas avejentan hemos de estar alerta a una secuencia de nosologías que tienen la posibilidad de empezar a mostrarse.

En la segunda parte repasaremos un nuevo conjunto de patologías y trastornos, si bien no son tan propios y representativos como los del primer conjunto, frecuentemente asimismo en perros viejos.

Régimen para un perro con inconvenientes hepáticos

Las pruebas primordiales en estas situaciones tienden a ser un análisis de sangre, ecografías y radiografías y en ciertos casos evidentes una biopsia.

En las situaciones mucho más leves, un cambio de dieta y supervisión tiende a ser bastante para batallar los inconvenientes hepáticos en los perros. Si el daño es adelantado, el veterinario nos dará antibióticos para batallar probables úlceras y conmociones. Por último, en las situaciones mucho más extremos, se puede necesitar cirugía para extirpar obstrucciones y tumores.

Régimen

El régimen para su perro va a depender de qué tan temprano se advierta el inconveniente y qué lo ocasionó. Para llevar a cabo esto, su veterinario precisará ver cuánto daño hay en el hígado. Los cambios en la dieta de forma frecuente asisten, con lo que su mascota puede requerir una dieta particular para asegurarse de conseguir los nutrientes y las calorías precisos para sostener su hígado.

Si bien ciertos suplementos tienen la posibilidad de contribuir a sanar el hígado, los antibióticos se emplean para las infecciones hepáticas. En dependencia de la recomendación de su veterinario, posiblemente deba mudar los otros fármacos de su perro o achicar la cantidad que toma. En ciertos casos, la cirugía puede ser una alternativa para perros con tumores o quistes.

¿Qué causa la patología hepática en perros y gatos?

Hay diversas razones de daño hepático tanto en tu perro como en tu gato. La razón más habitual está relacionada con la edad. Las mascotas mayores son mucho más dispuestas a esta clase de inconvenientes.

En algunas etnias de perros, el inconveniente asimismo puede estar relacionado con una condición genética. Exactamente de ahí que vamos a tener etnias como el Labrador Retriever, Golden Retriever, Dálmata, Cocker Spaniel o Yorkshire mucho más dispuestas a inconvenientes hepatobiliares.

Intoxicaciones

En el transcurso de un recorrido habitual, desgraciadamente nuestro perro está expuesto a intoxicarse por múltiples substancias, unas tomadas responsablemente y otras no. Si visitamos parques urbanos o zonas agrícolas, el perro puede intoxicarse con herbicidas, insecticidas o fertilizantes. Además de esto, puede consumir substancias venenosas destinadas a otros animales.

La hepatitis infecciosa es ocasionada por el adenovirus canino tipo 1 (CAV-1). Este virus se transmite por fluidos anatómicos de animales enfermos, como la orina, las heces o la saliva. No hay un régimen concreto, solo soporte escencial, y a veces puede cronificarse.

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