Descubre qué sucede cuando una tortuga abre la boca
En el momento de obtener una tortuga en cautividad hay algunas cosas que debemos tener en consideración. No logramos hallar una tortuga que se sienta hueca en el momento en que se mantiene en la mano. Tiene los ojos hundidos o saltones, o tiene burbujas en la nariz.
Si nos fijamos en una tortuga con las especificaciones antes citadas, es muy posible que tenga una patología grave de las vías respiratorias. En el momento en que nos llega una tortuga, es preferible no tomar contacto con el resto tortugas terrestres de la vivienda, de esta forma eludimos una patología que no hemos sentido.
Causas de patologías respiratorias en réptiles
En estos animales, el primordial fundamento es algún fallo en el cuidado de su hábitat, por temperatura bastante baja o exposición al frío, por exceso. humedad para esa clase, por la carencia de gradiente térmico en el recinto, etcétera.
El agobio prolongado asimismo ayuda a la aparición de infecciones de cualquier clase por fallo del sistema de defensa.
Aspecto del caparazón de una tortuga
La parte de arriba del caparazón de una tortuga está formada por 50 huesos que brotan de las costillas, las vértebras y las placas dérmicas. La parte de abajo, o plastrón, proviene de las clavículas, interclavículas y costillas. Todo el caparazón está cubierto con placas de queratina llamadas escudos que cubren las articulaciones entre los huesos.
Conforme medran las tortugas, se crean nuevos scooters. Se dijo que se puede comprender la edad de una tortuga contando las placas o líneas cerca del caparazón, pero no es de esta manera. En verdad, estos anillos representan periodos de desarrollo que no corresponden a años calendario; por poner un ejemplo, se tienen la posibilidad de conformar múltiples anillos en exactamente el mismo año. Además de esto, las tortugas en cautiverio medran de forma mucho más traje y, en ocasiones, no forman anillos.
El inconveniente de la comunicación en cautiverio
El enorme inconveniente en el momento en que se usan estos animales como mascotas es que su lenguaje corporal no es claro. Esto hace difícil que los instructores los comprendan, aun tratándose de algo tan fácil como enfermedades en general. Por ende, muchas anomalías de la salud tienen la posibilidad de insistir a lo largo de un buen tiempo y ocasionar casos mortales.
Si bien la comunicación de las tortugas es menos eficaz, es viable advertir múltiples hábitos que indican serios problemas médicos. Tenga presente que varios de ellos son sutiles, con lo que va a deber prestar mucha atención a su mascota. Las próximas son las señales de observación que señalan que tu tortuga puede fallecer.
Inconvenientes de todo género
El desarrollo elevado de la mandíbula es el inconveniente más frecuente con las tortugas. Los síntomas son que el pico o boca se lleva a cabo mucho más de lo debido, de forma que se desfigura y también imposibilita el ingreso a los alimentos. El veterinario debe reparar y cortar esa deformidad.
La diarrea puede suceder si solo nutrimos a nuestra mascota con lechuga. La manera de solventarlo es dar alimentos menos humedecidos y añadir alfalfa a la dieta. Si las heces huelen muy mal, hay que asistir al veterinario, la tortuga podría padecer de lombrices.
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